Este viernes pasado, los niños de 2 años celebramos la fiesta de fallas.
Como no podía ser de otra manera, nos vestimos cada uno con el típico blusón fallero y, con ayuda de nuestros papás, lo personalizamos con la insignia de nuestra clase.
Fue un día donde la música no paraba de sonar y donde pudimos disfrutar de una globotà ensordecedora, con chocolate calentito y acompañados de nuestros padres. ¡Ha sido un comienzo de fiesta explosivo! jeje.