Monstruosamente divertido. Cómo ya sabéis, el pasado viernes celebramos Halloween, nos lo pasamos genial cantando canciones, pintando nuestras caretas de calabaza y haciéndonos fotos en el photo call con nuestros papis, donde nos convertíamos en monstruos por obra de magia. Nuestras seños por un día eran brujas, pero eran buenas, solo utilizaron su magia para hacer de un día normal un día mostruosamente divertido.